Las transiciones en triatlón
La transición en el triatlón no es más que el cambio de una disciplina a otra, muchas veces ignorada por el público pero especialmente valorada por los triatletas ya que al algo más que se debe entrenar para realizarla en la mayor brevedad posible ya que mientras se realiza, el crono no se para, si no que continua.
Dentro del triatlón vamos a tener que realizar 2 transiciones. Cada una de ellas con varios elementos diferenciadores.
Transición T1. Es la primera transición y se pasa de la natación a la bici. Desde que salimos del agua hasta que subimos a la bici, en primer lugar nos vamos quitando el neopreno, las gafas y el gorro y llegados a la zona de transición, lo dejamos en nuestra zona asignada, colocamos el casco y salimos con la bici de la mano para ser montada en la zona habilitada para ello.
Transición T2. Es la última transición y se pasa de la bicicleta a la carrera a pie. Para ello entramos en la zona de transición con la bici en la mano la colocamos en nuestro sitio, dejamos el casco, nos colocamos las zapas de correr y nos disponemos a realizar el último sector que es el de carrera.
Pretransiones T0
Aunque esta parte no es cronometrada, en parte es una parte importante dentro de la competición, es la parte en la que colocaremos el material.
En primer lugar, el día de la prueba tras recoger nuestro dorsal junto con nuestra bolsa del corredor, debemos llevar la bicicleta a una zona de boxes o zona de transición que está custodiada en todo momento por los jueces de la federación y a la que solo se tendrá acceso con una identificación, evidentemente es algo totalmente necesario para nuestra tranquilidad a la hora de dejar allí nuestras tan mimadas bicicletas.
Una vez dentro de la zona de transición nos dirigimos a nuestra zona ya adjudicada que acostumbra a estar marcada con nuestro nombre y dorsal, junto con una pequeña caja en la que dejaremos el material que vallamos a usar durante la competición como el calzado que usaremos para correr, las gafas de sol, geles energéticos.... y por supuesto y como ya adelantaba, la bicicleta ya preparada en un desarrollo sencillo para empezar a rodar con ella, junto con las zapatillas ya enganchadas, con las gomas colocadas si decidimos y hemos entrenado previamente para montarnos sobre la bicicleta y ser capaces de calzarnos las calas sin caernos de la bici. Aunque esta parte se puede evitar si no hemos entrenado esta parte por lo que tendremos que salir con las calas puestas con la dificultad que esto nos proporciona para caminar, lo que hará que perdamos algunos segundos en la competición.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario